jueves, 14 de enero de 2010

Mi muñeco de nieve

Cundo de niño me despertaba un día de invierno y al mirar por la ventana descubría que un suave manto de nieve lo había cubierto todo mi primera ilusión era salir al jardín para hacer un gran muñeco de nieve. Ninguno de los que realicé siendo pequeño llegaron a satisfacer mi deseo.




Pasaron los años y mi muñeco de nieve seguía dando vueltas en mi cabeza. Hace exactamente cinco años al levantarme y mirar por la ventana vi que había caído una gran nevada, sin perder tiempo me puse manos a la obra y al final de la mañana mi muñeco estaba terminado, con sus dos tizones para hacer los ojos, una zanahoria por nariz y una vieja escoba en la mano.
Lo miré y le dije:
- esta vez si que estoy satisfecho. El me sonrió abiertamente.




Espero que cuando mis nietos sean mayores todavía siga nevando y que puedan realizar sus sueños haciendo un gran muñeco de nieve.

martes, 5 de enero de 2010

Noche de Reyes


Esta noche llegan los Reyes ! Acostaros tempranito y dormir, porque si os ven despiertos no os dejan nada !
Qué magia, levantarse al amanecer y encontrar los regalos !Hay que seguir siendo niño para poder vivir esos momentos la vida entera. Los Reyes son buenos y te traen algo todos los 6 de enero de la vida, pero tu tienes que seguir siendo "NIÑO". Los recuerdos son el mejor regalo que ahora me dejan. El tren eléctrico de mi hermano mayor, las Giselas, los tanques pulga, los cuentos pintalagua, el mutòn para mi madre, la patineta, los esquís, las "Lindas" y el muñeco se goma de Angélica, el tresillito de mimbre, el "Cheminova".... Los roscones !!!
Cada día de Reyes era especial y ahora recuerdo con AMOR las visitas: La Sra. Mariana, Sor Milagros, Joaquín Crespo, Mochales, Matilde, Alfonso Megías, La abuela Carlota, La tía Conchita con el tío Carlos y los primos, ....
Cuanta gente acudía para vernos contentos.
-Qué te han traído los Reyes?- te preguntaban. Y tu, ni te acordabas de todo lo que te habían traído. Como hoy, que ni te acuerdas, ni sabes ver todo lo que te han traído....(piénsalo bien!) Siempre traen algo.
Yo esperaba, por la tarde, la llegada de mis padrinos, que venían a traerme lo que habían dejado en su casa para my.
Hoy ellos siguen viniendo a verme, porque esta fecha me los devuelve, tan llenos de afecto como lo hicieron siempre.
CUANTOS RECUERDOS ! Todos se los debo a los Reyes. Me devuelven mi infancia. Es poco ? Incluso el recuerdo de los tres del banco Hipotecario que venían a vernos, disfrazados de Reyes, con el saquito de peladillas. Baltasar era el hermano de la tía Conchita.
Sabéis que jamás llegué a conocerlo de veras ? Lo vi siempre pintado de negrito Baltasar y hoy, que soy abuela, le quiero, porque completaba la fiesta.
Que los REYES lleguen esta noche para todos vosotros, llenos de regalos y cosas buenas. Que os durmáis sonando, como de chiquillos y que al amanecer disfrutéis de todo lo que veáis abriendo los ojos del alma.
Besos a montones !!
Mini

nota: Esta entrada ha sido escrita por mi hermana Virginia, me hace ilusión publicarla porque me ha traído muy gratos recuerdos.

domingo, 3 de enero de 2010


El farolero



Todas las tardes salíamos de casa vestidos de limpio y bien peinados para ir a la lechería, bajando la cuesta jugábamos a tapar la calle que no pase nadie…
solíamos cruzarnos con el farolero que venía desde abajo, siempre llevaba el cigarrillo en los labios y una larga vara con una llamita en la punta con la que iba encendiendo los faroles.
En cuanto le veíamos aparecer nos arremolinábamos alrededor de la criada y poníamos las manos atrás, seguíamos caminando como si nada pero sin atrevernos a abrir la boca.
El hombre iba subiendo lentamente parándose en cada farol, la claridad del cielo de verano mitigaba las tenues luces recién nacidas.
Cuando llegaba a nuestra altura nos miraba fijamente con cara severa y de detrás de su bigote siempre salían las mismas palabras:
- las manos atrás!
El se divertía con ese juego y se sentía satisfecho de su autoridad, nosotros no entendíamos muy bien por qué nos reprendía pero como niños disciplinados le obedecíamos sin protestar.
Es una pena que los faroleros hayan dejado de existir hace tiempo.
Después de muchos años no lo hemos olvidado.

sábado, 2 de enero de 2010

Mi árbol en la nieve


Mi árbol solitario resiste como puede año tras año , el pasado otoño una ventolera le ha arrancado una rama, pero sigue en su puesto tan orgulloso y altivo como siempre.